La despiadada política de inmigración que promulgó Donald J. Trump cuando estaba en la Casa Blanca movió a la derecha a la base del Partido Republicano.
Sus políticas ahora son un estándar: el llamado a “construir un muro” que en algún tiempo dividió a la derecha, aunque actualmente varios candidatos apoyan medidas aún más excepcionales, tales como utilizar el ejército para asegurar la frontera o dar por terminado el derecho a la ciudadanía por nacer en el país.
Las políticas de Donald Trump cimentaron las posturas de línea dura en la mayoría del Partido Republicano.
Ron DeSantis ha tratado de moverse a la derecha respecto a Trump en la inmigración, pero mayormente se mantiene alineado con él.
Tim Scott, senador de Carolina del Sur, está mayormente de acuerdo con casi todos los candidatos republicanos y apoya la mayoría de las políticas de Trump.
Presentó una legislación junto con otros senadores republicanos para retenerle el financiamiento a las ciudades santuario y desviar los recursos que los demócratas destinaron a los nuevos agentes del IRS, para financiar la seguridad fronteriza.
Vivek Ramaswamy, el hijo de inmigrantes hindúes, propuso algunas de las posturas más agresivas que cualquier otro candidato. Ha hecho un llamado a asegurar la frontera por cualquier medio necesario, incluyendo la fuerza militar, aunque eso podría violar la ley de 1878 que prohíbe el uso de tropas federales para aplicar la ley civil.
Nikki Haley, exgobernadora de Carolina del Sur, está de acuerdo con la mayoría de los candidatos y apoya gran parte de las políticas de Trump.
El exvicepresidente Mike Pence está de acuerdo con la mayoría de los demás candidatos y apoya casi todas las políticas de Trump. En el 2022, dijo que apoyaba el regreso de las políticas de inmigración de Trump, incluyendo la construcción del muro fronterizo, prohibir el establecimiento de ciudades santuario y reinstalar el “Permanecer en México” para los que buscan asilo.
Chris Christie, exgobernador de New Jersey, apoya mayormente al Partido Republicano, aunque también ha criticado a Trump por ese tema.
Propuso enviar a la frontera a la Guardia Nacional para frenar los cruces ilegales e interceptar el fentanilo, que ingresa mayormente a Estados Unidos a través de los puertos oficiales de entrada, oculto en el comercio legítimo.
Asa Hutchinson, exgobernador de Arkansas, es más moderado que Trump, pero apoya políticas estrictas. Está de acuerdo en aumentar el número de agentes de la Patrulla Fronteriza y autorizar la muerte para las personas acusadas de proveer fentanilo que provoque decesos.
Doug Burgum, gobernador de Dakota del Norte, ha expresado moderados puntos de vista pero no ha detallado sus propuestas.
Will Hurd, exrepresentante de Estados Unidos, se coloca en la parte moderada de los candidatos republicanos, catalogó la separación de familias como “inaceptable” y dijo que la prohibición de Trump a los viajeros de varios países musulmanes pone en peligro las vidas de los estadounidenses que están en el ejército y la diplomacia que prestan sus servicios en esos lugares.
Francis Suárez, alcalde de Miami, tiene una postura moderada, se opone a muchas de las políticas de inmigración de extrema derecha propuestas por otros candidatos, incluyendo el gobernador DeSantis.
Agencias.