El primer ministro británico, Boris Johnson, anunció que al menos una persona ha muerto en Reino Unido debido a la nueva variante de covid-19 ómicron, que solamente en Londres representa aproximadamente el “40 por ciento de los casos”.
En declaraciones a los medios durante una visita realizada a un centro de vacunación en el barrio de Paddington, en el oeste de la capital británica, el líder advirtió de que “tristemente, ómicron está produciendo hospitalizaciones y al menos un paciente ha fallecido” por ella.
El jefe del Ejecutivo anunció ayer que desde hoy se ofrecerá la dosis de refuerzo contra la covid-19 a todos los mayores de 18 años en Inglaterra -siempre que hayan pasado al menos tres meses desde la segunda dosis- a fin de combatir la “marea” de infecciones que se prevé llegará al país.
Johnson alertó hoy de que “alrededor del 40 por ciento” de los casos de covid-19 que se registran ahora en Londres pertenecen a esa variante, al tiempo que los hospitales del país ya han empezado a recibir pacientes infectados por ómicron y se teme un colapso del NHS (servicio público sanitario).
El “premier”, que la pasada semana anunció la entrada en vigor de nuevas restricciones como la generalización del uso de cubrebocas en lugares públicos cerrados, la exigencia de certificados covid para entrar en clubes nocturnos o espectáculos o la recomendación de teletrabajar, aludió a la votación prevista mañana en los Comunes, donde los diputados decidirán si apoyar esas normas.
“Creo que todo el mundo debe reconocer un par de cosas: que ómicron representa un riesgo muy grave para la salud pública, y que se propaga con mucha rapidez, y creo que no hay lugar para la complacencia”, remarcó.
Al mismo tiempo, recordó que el país cuenta con las vacunas y que la posición británica “es incomparablemente mejor que el pasado año”.
Agencias