Agencia Reforma
CIUDAD DE MÉXICO.- Tras la petición del presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Radio y la Televisión (CIRT) de eliminar los tiempos oficiales del Estado, el Presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió a que pronto hará una propuesta para reducirlos.
“Voy a analizar lo de los tiempos oficiales, que es como aquí se ha expresado un impuesto a la radio y la televisión”, indicó el Mandatario federal en la reunión de la CIRT.
“Por eso hago el compromiso con ustedes de analizar esta propuesta de reducir la contribución, el impuesto, los llamados tiempos oficiales, y les voy a dar una respuesta pronto sobre este asunto, además ni siquiera, como me lo informó José Luis, se requiere de una reforma legal, es un decreto, tengo yo esa facultad, de modo que pronto van a conocer ustedes sobre una propuesta que va a ir en el sentido de reducir los tiempos oficiales para que ustedes tengan ese estímulo, ese apoyo por los servicios tan importantes que prestan a la sociedad mexicana”.
La oferta del Presidente fue recibida con aplausos por los miembros de la CIRT congregados en el World Trade Center.
En la reunión de la CIRT, el Mandatario federal dijo que no los necesita dado que su Gobierno no es autoritario y él mismo se puede comunicar con la sociedad.
“Un Gobierno democrático no necesita de propaganda, no necesita de muchos tiempos oficiales ¿para qué tanto?”, dijo.
“En un régimen autoritario, antidemocrático se necesita la propaganda para afianzar el Gobierno, cuando hay un pueblo consciente como el que afortunadamente se tiene en nuestro País (…) No hace falta tanta propaganda, tanto acaparamiento de los espacios de la radio y la televisión.
“Yo tengo manera de cómo comunicarme con los ciudadanos, son todos los días, nada más lo hago todos los días, casi dos horas en la rueda de prensa, los diálogos circulares”, expresó.
El Presidente también alabó el poder que, dijo, tienen las redes sociales que para él han hecho que cualquier ciudadano se compare con las empresas de comunicación.
En 2002, durante el sexenio de Vicente Fox, se eliminó mediante un “decretazo” la obligación de que los medios, propiedad de la Nación pero concesionados, cedieran el 12.5 por ciento de su programación, lo que fue interpretado como un regalo a los empresarios.
López Obrador retomó la solicitud planteada por el presidente de la CIRT, José Luis Rodríguez, quien se quejó de la obligación impuesta en 1968 por el Gobierno de Gustavo Díaz Ordaz, para, dijo, reprimir la libertad de expresión y de información.