Agencia Reforma
CIUDAD DE MÉXICO.- A un año de que la industria manufacturera de Matamoros viviera su peor crisis laboral de su historia, el fantasma de las huelgas amenaza con seguir en 2020, luego que el Sindicato de Jornaleros, Obreros Industriales y de la Industria Maquiladora (SJOIIM) emplazara a huelga a 46 empresas para el 1 de enero.
Este año, el 90 por ciento de las plantas maquiladoras de esta frontera sufrieron paros ilegales y huelgas, provocados por el incremento del 100 por ciento a los salarios mínimos, y a la intervención de terceros en las negociaciones.
Juan Villafuerte Morales, Secretario General del SJOIIM dijo que en estas revisiones se está pidiendo a las empresas, un 30 por ciento de incremento salarial y jornadas laborales de 40 horas.
Además de la inclusión del bono anual que se paga de acuerdo con el porcentaje de incremento al salario mínimo.
“Estas son las propuestas que los trabajadores a través de la representación sindical, le están haciendo a las empresas, de ahí están partiendo las negociaciones”, precisó.
Señaló que ya se iniciaron las negociaciones, pero esta vez se están llevando a cabo de manera individual.
Esto, dijo, a fin de que evitar conflictos que pongan en riesgo la estabilidad y la paz laboral.
En tanto, subrayó que en el caso de reducir las jornadas de 48 a 40 horas, ya se viene dando en 14 empresas desde hace varios años.
“Lo que se busca es homologar las jornadas laborales, lo que beneficiaría a las empresas y a los trabajadores”, indicó.
En las negociaciones contractuales y de incremento a los salarios, explicó, participa la representación de 30 mil obreros.
La semana pasada el secretario de Desarrollo Económico en Tamaulipas, Carlos García González, dijo que el riesgo en las negociaciones contractuales que se realizan entre empresas y trabajadores, es mayor para los sindicatos si realizan paros laborales ilegales como los que hicieron a principios de este año, pues podrían perder su registro.
Precisó que la ley laboral vigente es muy clara, en que no se puede permitir ningún tipo de extorsión y no puede haber violencia.
“En los paros que se dieron de manera irregular a principios de año, desgraciadamente hubo violencia y hoy, a diferencia de la vez pasada, eso es causal de que los sindicatos puedan perder sus registro nacional o local”, explicó.
Dijo que la reforma atiende recomendaciones de la Organización Mundial del Trabajo, por eso la situación ahora será diferente.