Ciudad de México.- Elementos de la Fiscalía General de la República (FGR) detuvieron en Xochiltepetl, Morelos, a José Ignacio “N”, “El Nachín”, señalado como jefe de una célula de Los Rojos y encargado de las extorsiones en la zona sur poniente de la entidad.

Los agentes federales realizaron la detención en cumplimiento a una orden de aprehensión en contra de José Ignacio “N”, por su posible comisión en delitos de delincuencia organizada, con la finalidad de cometer secuestro exprés para ejecutar extorsión.
A partir de carpetas de investigación realizadas por el Ministerio Público Federal (MPF), especializado en investigación de delincuencia organizada, se solicitó y obtuvo la orden de captura del Juez de Distrito, Especializado en el Sistema Penal Acusatorio, con sede en Cuernavaca.

Con el apoyo del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), autoridades ministeriales y de la Policía Federal Ministerial (PFM) establecieron un cerco técnico, lo que permitió conocer el modo de operación y ubicación del “Nachín”, lo que permitió su aprehensión.

La FGR informó que la captura del indiciado se realizó con pleno respeto a sus derechos humanos, sin uso de la fuerza, ni afectación a terceros.
Las investigaciones de la institución autónoma establecieron que Vázquez Calderón era el líder de una célula del grupo criminal identificado como Los Rojos, encargado de las extorsiones en Mazatepec, en la zona sur poniente de Morelos.

“El Nachín” llegó a formar parte del círculo de confianza del líder de Los Rojos, Santiago Mazari Hernández, “El Carrete”.

Las investigaciones de la FGR establecieron que, por órdenes de Manuel Peralta Jaime, alias Manolo, actualmente detenido, “El Nachín” era el encargado del cobro de extorsiones a comerciantes, empresarios y autoridades municipales.

Además, coordinaba una célula encargada de realizar la colocación de mantas alusivas al grupo delictivo, así como eventos delictivos de alto impacto.

A partir de año pasado, Vázquez Calderón se encargó de reclutar y gestionar a un grupo de uniformados del Mando Único de Morelos adscritos a los municipios de la región a su cargo, para que le informaran sobre la realización de operativos, y asumió el control de la célula tras la detención de Manolo.