H. MATAMOROS, Tamaulipas.- Esta mañana decenas de derechohabientes de la Unidad de Medicina Familiar y Ambulatoria No.39 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) resultaron sorprendidos cuando se les notificó que no recibirían atención por falta de energía en el edificio y por lo tanto la instalaciones estaban cerradas.
En el lugar solo se encuentra una guardia de seguridad que los enviaba a la planta inferior, donde solo les toman sus nombres y reprograman en caso de tener una cita.
“No hay nada. Me dan medicamento y que todo está cerrado”, dijo la señora Eustaquia Cruz, derechohabiente que acudió este día.
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“No avisaron nada por eso vine porque luego uno anda a la carrera haciendo mi trabajo yo vine a que recoger medicamento y me dijeron que no, que iban a visar cuando ya se pudiera. Que van a hablar por teléfono”, continuó.
“No nos dieron nada, nomás dejamos datos hasta que se restablezca el servicio de la luz. Tenía cita pero la señorita dijo que nos pueden atender, que ellos me van a hablar”, compartió Juan Vázquez.
“Que no había luz y que no sabía para cuándo iban a tener servicio la clínica”, expuso una madre de familia de dos pequeñas a las que llevaba para la aplicación de vacuna contra el tétanos y la de rubiola y sarampión.
Hasta el momento no hay una postura oficial sobre lo que sucede y cuál es la razón por lo que la clínica se quedó sin energía, pese a que se ha buscado a los directivos.
Por: Arely López