BRASILIA.- Más de 500 mil niños y adolescentes de América Latina se han contagiado de Covid-19, y el número sigue en aumento, informó ayer la Organización Panamericana de la Salud (OPS), al advertir sobre el incremento de casos de coronavirus en países que habían manejado los brotes de manera efectiva, como Cuba y Jamaica, y otras 11 naciones caribeñas, que pasaron de transmisión moderada a intensa.
Sobre el número de contagios entre menores de edad, Carissa Etienne, directora regional de la OPS, señaló que muchos de ellos no son conscientes de que están infectados porque tienen síntomas leves o no los tienen.
Advirtió que en la Organización Mundial de la Salud (OMS) hay preocupación por el incremento de los contagios de Covid-19 en naciones que habían manejado los brotes de manera efectiva. La buena noticia, destacó, es que los casos severos han descendido en América y menos personas son hospitalizadas. América Latina registra 360 mil 202 fallecidos y 9 millones 791 mil 667 infectados.
Recordó que en Estados Unidos, las poblaciones de negros, latinos y nativos tienen tres veces más posibilidades de contraer coronavirus que sus pares blancos, cinco veces más riesgo de ser hospitalizados y dos veces más de morir por el nuevo coronavirus, mientras en las áreas amazónicas de Colombia y Brasil, los pueblos indígenas son 10 veces más propensos a contagiarse que otros grupos.
Estados Unidos tiene 7 millones 542 mil 59 casos activos y 211 mil 652 muertos, mientras el balance glogal es de 35 millones 980 mil 287 contagios y un millón 52 mil 193 fallecimientos por Covid-19, informó la Universidad Johns Hopkins.
La pandemia de Covid-19 demostró la necesidad de contar con cobertura universal de salud, afirmó ayer el secretario general de la Organización de Naciones Unidas, António Guterres, quien llamó a acelerar y aumentar las inversiones que garanticen esa atención.
Actualmente, más mitad de la población mundial no tiene acceso a ningún servicio de salud, mientras cada año, alrededor de 100 millones de personas caen en la pobreza debido a los catastróficos costos de la atención médica.
Destacó cómo la cobertura universal de salud requiere que los gobiernos incrementen la inversión en bienes comunes para la asistencia sanitaria, incluida la vigilancia y la comunicación de riesgos, para que el mundo nunca vuelva a enfrentar una situación como la actual.
También requiere que los programas en la materia sean inclusivos y equitativos, sin barreras financieras, pues un tratamiento médico no debe depender de la situación económica de cada quien, enfatizó.
Por lo pronto, Escocia, República Checa, Bruselas, regiones españolas y Reikiavik, en Islandia, impusieron nuevas restricciones ante el drástico repunte de contagios.