Entre 2014 y 2018, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, dice que ha gastado 98 millones de dólares en servicios médicos para personas que se encuentran bajo la custodia de CBP.
“La Patrulla Fronteriza está enviando a aproximadamente 50 personas cada día para recibir tratamiento médico”, dijo Marcelino Medina, Agente Supervisor de la Patrulla Fronteriza. “A este ritmo, estamos en camino de enviar a aproximadamente 31,000 personas para tratamiento médico este año, como en al año pasado donde sólo quedaron unas 12.000 personas”.
Según los datos obtenidos por CBS 4, los agentes de la Patrulla Fronteriza han pasado más de 57,000 horas en un hospital o centro médico. Lo que se traduce en 5,700 turnos de vigilancia hospitalaria en lugar de en la frontera.
“Un día, la semana pasada, hicimos 130 viajes al hospital”, dijo Kevin McAleenan, Comisionado de Aduanas y Protección Fronteriza. “Eso significa que pasamos 60,000 horas de agentes de la Patrulla Fronteriza esperando en el hospital con personas que reciben atención. Es como perder 30 agentes por año.”
Los agentes dicen que ya sea en el Río Bravo, que muchos corren el riesgo de ahogarse, escalar una pared o viajar con un calor extenuante, cruzar ilegalmente la frontera, sea como sea, es extremadamente peligroso.
“Tenemos personas que viajan en trenes de carga, saltan y se rompen los tobillos y se lesionan severamente cuando llegan al lado estadounidense. Las condiciones que hemos visto para los niños, problemas congénitos en los que los médicos han informado que este niño necesita cirugía dentro de dos semanas”, dijo McAleenan.
Según CBP, para el año fiscal 2019, más de 286,000 personas han sido detenidas a lo largo de la frontera suroeste.
Con información de: Valley Central