Rusia y Estados Unidos se enfrentaron ayer en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ante la concentración de tropas rusas en la frontera con Ucrania.
La reunión, convocada por la Casa Blanca, se llevó a cabo a pesar de que Rusia trató de impedir que los 15 miembros del Consejo dieran la luz verde a esta reunión.
La embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, señaló que la concentración de tropas rusas justifica la sesión.
“Ésta es la mayor movilización de tropas en Europa en décadas. Y mientras hablamos, Rusia sigue enviando más efectivos y armas”, declaró Thomas-Greenfield.
El conflicto escaló luego de que Rusia desplegó miles de soldados cerca de su frontera con Ucrania, lo que elevó la posibilidad de una invasión.
En este panorama, el embajador ruso ante la ONU, Vasily Nebenzya, rechazó las acusaciones.
En su intervención, aseguró que Estados Unidos está generando “histeria” con la convocatoria de la reunión del Consejo de Seguridad para hablar de Ucrania.
Nebenzya aseguró que ninguna autoridad rusa ha amenazado con invadir la exrepública soviética y que a los ucranianos les han “lavado el cerebro” con la “rusofobia” de Occidente.
El intento de Rusia de bloquear el encuentro regional fue rechazado por 10 de los 15 miembros del consejo multilateral.
Mientras los líderes de las potencias discutían el despliegue bélico, soldados ucranianos realizaron prácticas en trincheras.
En medio de la escalada de tensiones por la presencia rusa, tropas se desplazaron en la región separatista prorrusa de Donetsk.
Esto, a pesar de las intensas nevadas y bajas temperaturas de cerca de cero grados centígrados.
Agencia Reforma.