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El secretario de Defensa de Estados Unidos, Patrick Shanahan, aprobó el despliegue del sistema de defensa de misiles Patriot y del buque de transporte anfibio USS Arlington en el Medio Oriente en respuesta a una posible amenaza de Irán.

La decisión fue tomada días después de que el grupo de combate del portaviones USS Abraham Lincoln, así como el de un grupo operativo de bombarderos B-52, fueran desplegados en el golfo Pérsico para “enviar un mensaje claro e inequívoco” a Irán.

“Estos activos se unirán al grupo USS Abraham Lincoln y a un grupo especial de bombarderos de la Fuerza Aérea de Estados Unidos en la región del Medio Oriente en respuesta a las indicios de una mayor disposición iraní para realizar operaciones ofensivas contra las fuerzas estadounidenses y nuestros intereses”, indicó el Departamento de Defensa en un comunicado, de acuerdo con un despacho de la agencia rusa Sputnik.

Estados Unidos y sus aliados no quieren guerra con Irán, pero darán una respuesta “decidida” en caso de ser atacados, afirmó el secretario de Estado, Mike Pompeo, tras acusar a Irán de la escalada de tensión y calificó de “amenazantes” las acciones y declaraciones de Teherán en las últimas semanas.

De acuerdo con un reporte de la cadena CNN, la Administración Marítima de Estados Unidos emitió un aviso advirtiendo a los buques de embarcaciones comerciales que Irán o sus partidarios podrían estar apuntando a atacar embarcaciones comerciales e infraestructura de producción de petróleo.

La advertencia llega a medida que aumentan las tensiones entre los dos países, mientras la inteligencia de Estados Unidos muestra que es probable que Irán mueva misiles balísticos de corto alcance a bordo de barcos en el Golfo Pérsico, según funcionarios estadounidenses que tienen conocimiento directo de la situación.