Guadalajara, México.— Francisco Ibarra García de Quevedo falleció esta tarde a los 72 años de edad luego de padecer cáncer de colon.
Ibarra García de Quevedo fue uno de los 123 socios del Atlas en su etapa de Asociación Civil, además de ser presidente de la Federación Mexicana de Futbol y del Atlas.
El dirigente asumió la presidencia de la FMF en 1990 en medio de un ambiente tenso, ya que ganó las elecciones a Enrique Borja, quien era el candidato de Televisa, que en aquel entonces tenía los derechos exclusivos de transmisión de la Selección Mexicana de Futbol.
Junto a Ibarra, trabajó Emilio Maurer como Director de Selecciones Nacionales, y al desprenderse del Grupo Televisa, decidieron iniciar un proyecto ambicioso con el Tricolor luego del fracaso en la Copa Oro 1991 en la cual México perdió en Semifinales ante Estados Unidos, lo cual orilló a Manuel Lapuente a dejar la dirección técnica.
Ambos personajes eligieron a César Luis Menotti, quien había sido técnico campeón del mundo con la Selección de Argentina en el Mundial de Argentina 1978.
Además, Ibarra y Maurer lograron concretar que México fuera invitado por primera vez como Selección a la Copa América de 1993 luego de largas negociaciones con la Conmebol.
Pese a que México logró con Menotti establecer un estilo ofensivo ante rivales europeos como Alemania, y clasificar a la fase final de la eliminatoria mundialista de Concacaf, al regreso del Grupo Televisa a finales de 1992, el técnico argentino renunció a su cargo cuando Ibarra y Maurer quedaron fuera del organigrama de la FMF.
Posteriormente, Ibarra fue elegido como presidente del Atlas de 1995 a 1999. Bajo su administración, se apuntaló el proyecto de las Fuerzas Básicas que se inició con José Luis Real y se consolidó a la llegada de Marcelo Bielsa.
Fue Ibarra quien decidió despedir a Bielsa al poco tiempo de haber tomado el mando, ya que los resultados eran negativos.
Para la temporada 1995-1996 contrató a Eduardo Solari (padre de Santiago Solari, actual técnico del América), con quien se clasificaron en tercer lugar general, pero fueron eliminados en Cuartos de Final por el Veracruz.
Tras un proyecto fallido con Efraín Flores como entrenador, para el Invierno 97, Ibarra contrató a Ricardo La Volpe, con quien Atlas disputó su primera Final en el Verano 99 bajo el formato de Liguillas. Aquella serie la perdieron ante el Toluca en serie de penaltis, y es recordada como una de las mejores finales del futbol mexicano.
Justo al concluir la participación del Atlas, Ibarra terminó su gestión como presidente del equipo y entregó la estafeta a Alberto de la Torre.
En 2012, estuvo cerca de regresar al futbol como directivo como asesor de Estudiantes Tecos al recomendar al argentino Omar Asad como técnico, sin embargo, no hubo acuerdo, y el directivo se hizo a un lado del proyecto.
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