La Reserva Federal mantuvo estables las tasas de interés el miércoles, como se esperaba, pero las autoridades del banco central estadunidense indicaron que aún anticipan una reducción de los costos de endeudamiento en medio punto porcentual para fines de este año en el contexto de una desaceleración del crecimiento económico y, eventualmente, una caída de la inflación.

Tras evaluar la implementación de aranceles por parte de la administración Trump, los funcionarios de la Fed ajustaron sus perspectivas de inflación para este año, y se espera que su indicador preferido de aumento de precios finalice el año en un 2.7%, frente al 2.5% previsto en diciembre. La Fed tiene como objetivo una inflación del 2%.

Pero también redujeron las perspectivas de crecimiento económico para este año del 2.1% al 1.7%, con un desempleo ligeramente más alto al final de este año. Los responsables de las políticas dijeron que los riesgos habían aumentado y hubo un sentimiento casi unánime de que las perspectivas para el año eran confusas.

“La incertidumbre sobre las perspectivas ha aumentado”, declaró la Fed en un nuevo comunicado de política monetaria que refleja las primeras semanas de la administración Trump y la implementación inicial de lo que, según funcionarios de la Casa Blanca, serán aranceles globales sobre las importaciones. La Fed mantuvo su tasa de política monetaria en el rango del 4.25 % al 4.50 %.

La Fed también dijo que desacelerará la actual reducción de su balance, conocida como ajuste cuantitativo. El gobernador de la Reserva Federal, Chris Waller, discrepó de la declaración de política debido al cambio en la política del balance.

Menor crecimiento en EU
Las proyecciones de tasas coincidieron con las expectativas establecidas por los mercados financieros antes de la reunión y mantuvieron intacta la perspectiva general de la Fed de que una desaceleración gradual de la inflación permitirá una mayor flexibilización de la política monetaria.

Pero el camino podría ser más complicado. Si bien el comunicado no menciona al presidente Donald Trump ni los aranceles, las proyecciones de una mayor inflación este año coinciden con la presentación de sus planes arancelarios.

Sin embargo, parece que por ahora la Fed está mirando más allá del cambio de precios involucrado en esos impuestos a las importaciones, tratándolos como un cambio único en lugar de una fuente persistente de presiones sobre los precios. La inflación subyacente más allá de 2025 se mantuvo sin cambios respecto de las proyecciones de la Fed en diciembre y se espera que vuelva al 2% a fines de 2027.

La proyección de recortes de tasas más allá de este año también se mantuvo sin cambios, y llegará al 3.1% para fines de 2027, cerca del nivel que se considera que tiene un efecto neutral que no alienta ni desalienta el gasto y la inversión.

La Reserva Federal redujo su tasa de interés de referencia en un punto porcentual completo el año pasado, pero ha mantenido las tasas sin cambios desde diciembre mientras espera más evidencia de que la inflación continuará cayendo y, más recientemente, más claridad sobre el impacto de las políticas de Trump.

En comparación con la promesa de Trump de una futura “época dorada” económica gracias a su impulso para imponer aranceles, deportar a un gran número de migrantes y flexibilizar las regulaciones, las perspectivas de la Fed prevén un crecimiento del 1.7 % este año y de tan solo el 1.8 % tanto en 2026 como en 2027, con una tasa de desempleo del 4,4 % este año y del 4,3 % en 2026 y 2027. Esta cifra está por encima de los mínimos de los últimos años y de la última lectura del 4,1 % de febrero.

Agencias.