El estado de Florida está considerando una significativa reforma educativa que cambiaría requisitos para graduarse de secundaria en las escuelas públicas. La iniciativa, denominada Proyecto de Ley SB 166, busca eliminar la obligatoriedad de aprobar los exámenes estandarizados de inglés y álgebra, actualmente exigidos a los estudiantes de secundaria para recibir su diploma.
En este momento, los alumnos deben aprobar la evaluación estatal de Lengua y Literatura en Inglés (ELA) de décimo grado o bien obtener una puntuación equivalente en exámenes alternativos aprobados por el estado. Asimismo, están obligados a pasar la evaluación estatal de fin de curso de Álgebra I o presentar una calificación comparativa equivalente.
Estas evaluaciones son consideradas esenciales por el sistema educativo para asegurar que los estudiantes egresen con un dominio adecuado de estas asignaturas clave.
La nueva propuesta legislativa, introducida oficialmente el pasado 19 de febrero, busca remover estos requisitos específicos y permitiría a los estudiantes graduarse con base únicamente en su rendimiento académico general, incluyendo las calificaciones obtenidas durante sus cursos regulares. Esto eliminaría la presión actual sobre los estudiantes respecto a estos exámenes decisivos.
Los impulsores de la ley argumentan que esta modificación ofrecerá mayor flexibilidad a los estudiantes, permitiéndoles enfocar su atención y esfuerzo en los cursos escolares sin la preocupación constante por la obtención de puntajes específicos en exámenes estandarizados.
“El objetivo es simplificar el proceso de graduación, reducir cargas administrativas y permitir que los estudiantes se concentren en aprender más que en pasar pruebas”, sostiene el texto del proyecto.
No obstante, esta medida ha generado debate y preocupación entre padres, educadores y expertos educativos. Algunos cuestionan si los jóvenes estarán suficientemente preparados para enfrentar estudios universitarios o ingresar al mercado laboral sin estas evaluaciones objetivas que miden habilidades fundamentales en matemáticas y lenguaje.
Por su parte, los legisladores que apoyan el proyecto señalan que “la educación no debería estar centrada únicamente en pruebas estandarizadas”, sino en un desarrollo integral que tome en cuenta la totalidad del desempeño académico del estudiante.
Hasta el momento, la propuesta ha avanzado sin mayores obstáculos en las instancias legislativas. El Comité de Educación Pre-K-12 aprobó la propuesta el pasado 3 de marzo con una votación unánime de 7 votos a favor y ninguno en contra. Poco después, el 11 de marzo, el Comité de Asignaciones para Educación Pre-K-12 también respaldó el proyecto con una votación igualmente unánime de 9 votos a favor y ninguno en contra.
La SB 166 no se limita exclusivamente a la eliminación de estos exámenes obligatorios, sino que abarca otras reformas administrativas. El documento de 107 páginas incluye múltiples modificaciones en diversos artículos de los Estatutos de Florida, orientadas a agilizar los procedimientos administrativos, reducir burocracia y mejorar la eficiencia del sistema educativo en general.
Agencias.
