Agencia Reforma
SEVILLA, España.- Volvió LaLiga y lo hizo con un triunfo del Sevilla 2-0 sobre el Betis en el Estadio Ramón Sánchez Pizjuán sin aficionados, por la Jornada 28.
El Gran Derbi fue para el conjunto del nervión debido a que tuvo mayor claridad al ataque y halló los goles por conducto de Lucas Ocampos, de penalti, al 56; y de Fernando Reges, al 62′.
El mexicano Diego Lainez ingresó al 60′ y tuvo una buena actuación, con desbordes peligrosos en los que metió buenos centros pero sus compañeros no supieron rematar a arco.
Su compatriota Andrés Guardado se quedó en la banca.
Antes del silbatazo inicial, se guardó un minuto de silencio por todas las víctimas de la pandemia del Covid-19, mientras los jugadores se pusieron a lo largo del círculo central.
En tribuna, los suplentes con cubrebocas, y todos separados con metros de distancia.
El cuerpo técnico y todo el personal de cancha con cubrebocas, excepto los entrenadores, quienes incluso platicaron a corta distancia antes del duelo.
El Sevilla fue mejor desde el arranque y halló la primera anotación vía los 11 pasos luego que el árbitro juzgó una falta de Marc Batra sobre Luuk de Jong, cuando saltaron para cabecear. No había penalti pero el VAR no puede intervenir en este caso.
Pese a los reclamos, cuando a los béticos no les importó irse encima del silbante, Ocampos cobró la pena máxima.
Reges amplió la ventaja con un cabezazo luego de un taconcito a primer poste en el cobro de un tiro de esquina.
Hubo abrazos en el festejo porque no está prohibido, por eso el silbante no sacó tarjetas; eso si, los jugadores cuidaron de no dar la mano, como lo hizo también el colegiado cuando se acercó a dialogar con el DT bético Rubí, que chocaron el antebrazo.
Al 31′ y 72′ hubo pausa de hidratación, la segunda aprovechando la lesión de Munir, el primer jugador en salir lesionado en la vuelta de LaLiga.
Fue evidente el cansancio que presentaron los jugadores en los últimos 15 minutos, con varios jugadores que mostraron calambres, como al 89′ que Bartra hasta pidió su sustitución dejándose caer fuera de la cancha.
Por eso los dos clubes hicieron sus cinco modificaciones.
Así volvió LaLiga y eso significó que el Sevilla se afianzara en el tercer lugar de la clasificación con 50 puntos y dejó al Betis 12 con 33 unidades.