El grupo islamista palestino Hamás lanzó el sábado el mayor ataque contra Israel en años, matando al menos 100 personas y tomando decenas de rehenes en un asalto sorpresa que combinó hombres armados que cruzaron al territorio del Estado judío con una andanada de cohetes disparados desde Gaza.
Israel dijo que el grupo respaldado por Irán había declarado la guerra mientras su Ejército confirmaba combates con militantes en varias ciudades israelíes y bases militares cerca de Gaza y el primer ministro Benjamin Netanyahu prometía tomar represalias.
“Nuestro enemigo pagará un precio que nunca ha conocido”, dijo. “Estamos en guerra y la ganaremos”.
El Ejército israelí informó que había respondido con ataques aéreos en Gaza, donde testigos informaron que se habían oído fuertes explosiones y que varios muertos habían sido trasladados a hospitales. Agregó que las fuerzas navales habían matado a decenas de militantes palestinos que intentaban infiltrarse en Israel por mar.
El jefe adjunto de Hamás, Saleh al-Arouri, declaró a Al Yazira que el grupo tenía en su poder un gran número de cautivos israelíes, entre ellos funcionarios de alto rango. Afirmó que el grupo tenía suficientes cautivos para obligar al Estado judío a liberar a todos los palestinos de sus cárceles.