En su primera visita a la frontera desde que dejó el cargo, el expresidente de EUA, Donald Trump, urgió retomar su polémica política de asilo que obligó a decenas de miles de migrantes a esperar en México mientras se procesaban sus casos.
Trump acompañó al gobernador de Texas, Gregg Abbott, en Weslaco, en el Valle del Río Grande, en una reunión de seguridad enfocada en la situación migratoria. Su visita llega unos días después de que la Vicepresidenta Kamala Harris visitara El Paso, también en Texas, para supervisar el trabajo en los centros de procesamiento de migrantes.
“Tenemos que regresar el ‘Quédate en México’. Eso fue algo muy difícil de conseguir. Nos llevó muchas litigaciones, negociar con México”, dijo Trump en la reunión con policías estatales.
“Realmente creo que el presidente de México es un gran tipo. Sorpresivamente, él quiere que esto funcione, porque tiene a gente arrojándose por su país por millones” agregó Trump en referencia a Andrés Manuel López Obrador.
El Protocolo de Protección al Migrante, conocido como “Quédate en México”, obligaba a los solicitantes de asilo a esperar en abarrotados campamentos en ciudades fronterizas mexicanas mientras los tribunales de inmigración de Estados Unidos procesaban sus casos. Decenas de miles estuvieron sujetos al programa, que la administración Biden eliminó al llegar al poder.
Tras una primera conferencia, el exmandatario acudió a un punto del muro fronterizo, donde repitió sus comentarios.
“Teníamos la mejor frontera y ahora todo terminó”, aseguró el exmandatario.
Abbott, que invitó a Trump a su estado, ha lanzado una iniciativa para continuar el muro fronterizo con fondos estatales y ha solicitado ayuda policial a otros estados para atender el creciente flujo migratorio, acusando al presidente Joe Biden de generar una crisis fronteriza por relajar las normas antimigrantes. Los gobernadores de Florida, Arkansas, Nebraska, Iowa y Dakota del Sur han atendido el llamado y anunciaron el envío de tropas y policías.
El exmandatario defendió sus políticas migratorias, incluyendo el muro fronterizo, que aseguró era impenetrable, y afirmó que la administración Biden se equivocó al detener su construcción.
“Podrían haberlo completado en unos meses, pero no quisieron. Escuché rumores de que lo querían hacer de nuevo”, dijo.
“Construimos un muro que no era penetrable, casi lo terminamos, y luego hubo una elección en la lo que lo hicimos mejor que la pasada (…) nuestras elecciones son un desastre”.
Acusó a los demócratas de iniciar una campaña de desinformación al culpar a su administración de la actual situación en la frontera. La semana pasada Harris, en efecto, afirmó que la situación migratoria en El Paso, y en la frontera, había sido generada por la política de “Quédate en México” de Trump.
Trump reiteró que se llevaba muy bien con López Obrador, y que a él le interesaba que la situación migratoria se arreglara.
“Muy diferente persuasión, el proceso es diferente, más en el lado socialista, pero les diré que trabajamos muy bien, es una persona increíble y ama México”, indicó.
Agencia Reforma