El Presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, visitó la región litoral de Sao Paulo donde las lluvias más intensas de la historia del país, dejaron durante el fin de semana de carnaval, cuarenta muertos y decenas de desaparecidos.

Las tareas de rescate estaban concentradas en el extenso municipio de Sao Sebastiao, un destino playero ubicado a unos 200 km de la ciudad de Sao Paulo (sureste) y que sufrió lluvias intensas.

Lula Da Silva, viajó al lugar para sobrevolar la zona del desastre donde deslizamientos de tierra desaparecieron al menos unas 50 casas. Desde el helicóptero eran visibles los ríos de agua enlodada cubriendo casas cerca de las playas.

“No construyamos casas en un lugar que pueda ser escenario de otras lluvias, donde otras personas puedan morir en un deslizamiento de tierra”, señaló el presidente ante los medios, tocando el problema del urbanismo improvisado en el país.

Según las autoridades, cayeron más de 600 milímetros de lluvia en 24 horas, más del doble de lo esperado para el mes.

El Gobierno de Sao Paulo informó que las precipitaciones en el litoral paulista marcaron el mayor acumulado en la historia de Brasil y una de las mayores tragedias de la historia de ese estado.

Asimismo subió el balance a cuarenta muertos: 39 en Sao Sebastiao y una niña en la localidad de Ubatuba, y decenas de personas permanecen desaparecidas.

También se reportaron mil 730 personas evacuadas y 766 desabrigados, y según las autoridades, desplegaron más de 600 socorristas, militares y policías en las labores de rescate.