Un ataque ruso con misiles contra la región de Dnispropetrovsk, en el Sureste de Ucrania, dejó al menos nueve personas muertes y decenas de heridos, informaron este martes las autoridades locales. El impacto afectó directamente a la capital regional, Dnipró, así como la ciudad de Samar, ubicada a unos 10 kilómetros de distancia.

El gobernador de la región, Serhi Lysak, confirmó que siete personas fallecieron en Dnipró debido a la doble onda expansiva que también alcanzó un tren de pasajeros. El estallido destrozó las ventanillas de varios vagones y causó lesiones a personas a bordo.

“La onda expansiva también destrozó las ventanillas de vagones de tren y cubrió a los pasajeros de cristales rotos”, señaló Lysak.

En Samar, dos personas más murieron por el mismo ataque, de acuerdo con el Servicio Estatal de Emergencias. En total, cerca de 70 personas resultaron heridas, entre ellas 10 menores de edad.

Las autoridades no descartan que la cifra aumente con el paso de las horas. Sibiha informó a través de su cuenta en la red social X que “escuelas, guarderías y un hospital también sufrieron daños en Dnipró”, sin precisar el estado de las instalaciones o posibles víctimas dentro de ellas.

Mientras tanto, aún no se han dado detalles específicos sobre la magnitud de los daños en la ciudad de Samar, aunque se confirmó la pérdida de vidas humanas.

El ataque ocurre en un momento clave, cuando los líderes de la OTAN se encuentran reunidos en La Haya para una cumbre en la que el presidente ucraniano Volodímir Zelenski busca obtener mayores compromisos militares contra Rusia.

Rusia ha intensificado su ofensiva aérea en las últimas semanas. El 17 de junio, un ataque similar contra Kiev causó la muerte de 28 personas, siendo el más letal en lo que va del año. Apenas un día antes del ataque en Dnipró, otras 10 personas murieron por bombardeos en la capital ucraniana y sus alrededores.

Sibiha instó a los socios de la OTAN a actuar con firmeza: “Es una cuestión de credibilidad que los aliados aumenten la presión sobre Moscú”.

Las autoridades ucranianas continúan con las labores de rescate y atención a los heridos, al tiempo que hacen un nuevo llamado internacional para reforzar las defensas del país frente a la invasión rusa iniciada en 2022.