“El candidato Nayib Bukele obtiene el 87% de intención de voto y por los datos, esto puede subir hasta 90 puntos, de tal manera es una mayoría completamente absoluta”, afirmó el director de CID-Gallup, Luis Haug, en conferencia de prensa.
“En todos los años que nosotros llevamos evaluando encuestas y los distintos gobiernos y candidatos nunca habíamos observado una distancia de esta magnitud en una elección”, aseguró.
La Secretaría de Relaciones Exteriores de México (SRE) felicitó a Bukele por su reelección.
“La @SRE_mx felicita al presidente @nayibbukele por su victoria en las elecciones presidenciales de El Salvador. Confiamos en seguir construyendo un futuro de cooperación y desarrollo mutuo entre nuestras naciones”, indicó la cancillería mexicana en una publicación en X.
China también felicitó a Bukele luego que el mandatario declarara su victoria.
“Extendemos nuestras más sinceras felicitaciones al presidente Bukele y a su partido Nuevas Ideas por el triunfo histórico en estas elecciones”, dijo la embajada de China en el país centroamericano. “Desde ya nos ponemos a disposición para fortalecer lazos de amistad y la cooperación bilateral entre ambos países”.
A pesar de contar con un amplio apoyo popular, el plan de seguridad de Bukele ha levantado señalamientos de supuestas violaciones a los derechos humanos y su participación en los comicios ha sido cuestionada por la oposición y parte de la comunidad internacional porque la Constitución prohíbe la reelección inmediata.
Pocos minutos antes del cierre de las urnas, a las 17:00 locales, Bukele rechazó las críticas de organismos de derechos humanos al régimen de excepción vigente desde marzo de 2022, al señalar como “errores” las detención de miles de inocentes.
El mandatario afirmó que todas las policías del mundo arrestan inocentes y defendió que El Salvador tenga la tasa de encarcelamiento más alta en el mundo, al señalar que el país era “la capital de homicidios del mundo.
“Ahora lo que viene para El Salvador es un período de prosperidad porque ya no hay un freno para poner un negocio, ya no hay freno para estudiar, ya no hay freno para trabajar, ya no hay freno para el turismo”, agregó.
Ante las acusaciones de sus críticos de que instaló en El Salvador una “dictadura”, Bukele negó también que esté atentando contra la democracia.
“Nosotros no estamos sustituyendo la democracia, porque El Salvador jamás tuvo democracia, por primera vez en la historia que El Salvador tiene democracia, y no lo digo yo, lo dice el pueblo”, manifestó.
Al ser consultado sobre si planeaba reformar la Constitución para incluir la reelección indefinida, Bukele dijo que no creía que “sea necesaria una reforma constitucional”, pero no respondió si intentaría postularse para un tercer mandato.
A diferencia de elecciones previas, los colores y emblemas de los partidos de oposición brillaban por su ausencia. El cian del oficialista Nuevas Ideas acaparaba la escena.
Bukele asumió a mediados de 2019 como el presidente más joven en la historia moderna de El Salvador. Desde entonces, su gobierno logró apaciguar la criminalidad tras apresar al 1% de los 6.3 millones de habitantes del país.