En México el confinamiento por la pandemia de covid-19 recrudeció la violencia que desde antes, ya padecían adolescentes y jóvenes. Además, aumentó los síntomas depresivos y el consumo de marihuana, alcohol y opioides, reveló el estudio VoCeS-19.
El 43% de los participantes reportó haber vivido algún tipo de violencia física, psicológica y sexual
Los grupos más afectados fueron mujeres y población autodefinida como no binaria.
De este sector, el 28% registró un aumento en la frecuencia o gravedad de estos actos violentos, donde la población indígena, afromexicana y con niveles socioeconómicos más bajos, fue la más afectada.
La investigación VoCeS-19, realizada por el Instituto Mexicano de la Juventud (Imjuve) en colaboración con el Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva (CNEGSR) de la Secretaría de Salud y el Population Council de México, también señaló que el 19 % de las personas encuestadas dijo haber estado expuesta a violencia sexual, que con la pandemia aumentó casi en 4 por ciento.
En la encuesta que se realizó en línea con la participación de 123 mil adolescentes de 15 a 17 años y a jóvenes de 18 a 24 años, donde 55 mil 692 la respondieron por completo, el 51% reportó aumento del acoso virtual y 24 % señaló que incrementó la violencia en su lugar de residencia.
Durante la presentación virtual, Isabel Vieitez Martínez, directora General del Population Council México, explicó que “si bien, el impacto de la pandemia ha sido generalizado, las repercusiones han sido más severas en los grupos de mayor exclusión social y económica, como son la población autodefinida como no binaria, indígena, afrodescendiente o de menores ingresos”.
El consumo de sustancias aumentó en lo que va de la emergencia sanitaria, debido a que con el 21%, el uso de la marihuana fue el que más se incrementó entre los jóvenes.
Mientras que el uso de opioides se elevó a 18% entre los adolescentes y el consumo de alcohol aumentó en 14% en ambos grupos.
En lo referente a la salud mental, 7 de cada 10 adolescentes experimentaron síntomas depresivos y el 62 % sufrió de ansiedad.
En el caso de las clases virtuales y la deserción escolar, los adolescentes y los jóvenes con menores recursos fueron los más afectados.
Con el nivel socio económico (NSE) más alto, el 99 por ciento respondió que tenía acceso a internet privado. En contraste, en las personas con el NSE más bajó, solo el 40 por ciento dijo tener acceso.
Entre las y los adolescentes que abandonaron sus estudios, con un 42%, la pandemia fue la razón más citada.
El 71% de las y los participantes sintieron que “era algo probable o altamente probable que su hogar contaría con menos ingresos en el año en curso”.
Agencia Reforma