Luego de la explosión en Puebla a causa de una toma ilegal en un ducto de gas, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que se corrió con suerte y no se agravó el problema, por lo que llamó a la población a denunciar quienes se dedican al huachicoleo.
El mandatario advirtió sobre lo peligrosa que es la práctica del huachicoleo, misma que pone en riesgo a la ciudadanía, tal como sucedió este fin de semana en la Junta Auxiliar de San Pablo Xochimehuacán, en Puebla, donde al momento se ha confirmado un deceso y la hospitalización de 15 personas, entre ellas 6 menores de edad.
López Obrador destacó además la actuación de los policías de Puebla, quienes, al reportarse la fuga de gas en el predio ubicado en Avenida Ferrocarril y Calle de los Palos, comenzaron a evacuar a la ciudanía por el riesgo que corrían en la zona.
“Tuvimos suerte en este caso de Puebla, y la gente actuó muy bien. Debo reconocer la actuación rápida de la policía de Puebla, porque recibieron el reporte, olía a gas y lo que hicieron fue de inmediato llamar a la gente para abandonar sus hogares e incluso consiguieron camiones y hubo un desalojo de 2 mil personas”, expresó el presidente.
Resaltó que en el combate el huachicoleo se han tenido avances, ya que de los 80 mil barriles de gasolinas que era robados anteriormente, la cifra del día revela que esto se ha reducido a 3 mil.
Con el objetivo combatir el huachicoleo de gas, el gobernador de Puebla, Luis Miguel Barbosa, anunció ayer que propondrá a los ediles de la entidad la revisión coordinada de gaseras y distribuidoras.
Durante la conferencia sobre la explosión causada por la toma ilegal de un ducto de gas de Pemex, en la Junta Auxiliar de San Pablo Xochimehuacán, el mandatario estatal informó que esta acción tendrá también el objetivo de salvaguardar a la ciudadanía.
Excélsior