Programas antimachismo deben integrarse a las políticas públicas con el fin de prevenir de raíz la violencia contra las mujeres, considera la Federación de Barras y Asociaciones de Abogados en Tamaulipas.
“Que desde niños en los hogares se enseñe a los hijos que la violencia no debe estar presente, pero al mismo tiempo haya programas en las escuelas para detectar y evitar aquellas expresiones de machismo que en la etapa adulta contribuyen a generar agresiones hacia ellas”, expuso Fausto Villarreal García.
Y es que, menciona, la violencia inicia en la familia, en hogares donde los propios padres asumen conductas de machismo contra sus parejas e hijas y limitan su libre desarrollo al no dejarlas salir, trabajar o convivir en sociedad, pensando erróneamente que ellas están para servir al varón y dependen de él.
Villarreal García, agrega que estas prohibiciones se convierten en agresiones que van de menos a más, llegando a los golpes o a la muerte, o en el mejor de los casos a un maltrato psicológico que marca la vida de las víctimas.
El representante del organismo jurídico en la zona sur, señaló que es importante que las escuelas tengan programas no solo para los alumnos, sino también para los maestros. Aunado a ello, dijo, se requiere menos burocratización, un sencillo procedimiento que atienda inmediatamente a la mujer que sufre violencia y se le proteja en la realidad, no solo en la ley.
Milenio Tamaulipas