La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, ha subrayado que el T-MEC (Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá) es un acuerdo vinculante y de cumplimiento obligatorio para los tres países miembros.
En la antesala de la revisión programada para el próximo año, Sheinbaum dejó claro que el proceso legal que se llevará a cabo es únicamente una revisión periódica, y no una renegociación completa. Explicó que, al ser el T-MEC una ley vigente desde 2020, la revisión no requiere una nueva aprobación del Senado de México ni de los congresos de EE. UU. y Canadá.
La mandataria enfatizó que, legalmente, es muy difícil que México pueda modificar o abandonar cláusulas ya pactadas, pues eso implicaría una renegociación completa del acuerdo, que sí requeriría la aprobación legislativa.