En la frontera entre El Paso y Ciudad Juárez, Chihuahua (lugar a donde han llegado en los últimos días un promedio de 2 mil 500 migrantes cada 24 horas) la Guardia Nacional de Texas desplegó 400 efectivos militares y vehículos blindados para impedir que indocumentados procedentes de Centro y Sudamérica crucen el río Bravo y soliciten asilo al gobierno de Estados Unidos.
Estas medidas de seguridad tienen como objetivo combatir el nivel récord de migrantes y actividad delictiva trasnacional, dio a conocer el Departamento Militar de Texas mediante un comunicado.
Desde la madrugada del martes, 20 tanquetas y decenas de elementos militares resguardan con vallas de alambre de púas el bordo del Bravo, donde termina el muro fronterizo y en las inmediaciones del puente internacional Paso del Norte, frente al bulevar Bernardo Norzagaray de Ciudad Juárez.
El Departamento Militar texano explicó que los soldados son parte de una estrategia del gobernador Greg Abbott para lidiar contra la migración indocumentada, también concretó que en esta operación participan soldados adscritos al Batallón de Policía Militar 606 y a la Fuerza de Respuesta de Seguridad, capacitados “en operaciones de disturbios civiles y respuesta a la migración masiva”.
Agregó que la Guardia Nacional de Texas responde de esta forma a los altos niveles de cruces fronterizos sin documentos registrados la semana pasada y al fin de la vigencia de la legislación conocida como Título 42, que expulsa migrantes con el argumento de frenar la propagación del covid-19.
En tanto, el alcalde de Ciudad Juárez, Cruz Pérez Cuéllar, calificó como “exceso” la presencia de tanquetas y las barricadas de alambre. Asimismo, ofreció que se habilitarán los espacios necesarios en albergues para migrantes, y alojar a los extranjeros que desde este martes no podrán cruzar la frontera.
Según la Casa Blanca, hay alrededor de unos 23 mil agentes desplegados en la frontera sur actualmente.
Agencia.