El político panista Ricardo Anaya encendió la polémica al asegurar que existe un “Judas” dentro de Morena, identificando al diputado Alfonso Ramírez Cuéllar, cuya propuesta de adelantar la revocación de mandato de la presidenta Claudia Sheinbaum a 2027 (para que coincida con las elecciones intermedias) es, en realidad, una traición.

La Teoría de la Traición Opositora y Morenista

Según Anaya, Sheinbaum no solo sería revocada con los votos de la oposición, sino también con el apoyo de “muchos morenistas que la van a traicionar”. El verdadero objetivo, dice el panista, es que la presidenta aparezca en la boleta para que los gobernadores morenistas puedan controlar esa elección y usarla para “amenazar a la Presidenta”.

Anaya justificó esta supuesta deslealtad afirmando que Morena está en una “caída libre” debido al descontrol de la violencia e inseguridad, una situación que, según él, se refleja en las encuestas públicas.

El Reto de Anaya y su Propuesta para Gobernadores

El panista elevó la apuesta al retar a Sheinbaum a poner la revocación en la boleta, asegurando que el resultado será la destitución de la presidenta.

Además, propuso que el ejercicio de revocación de 2027 se extienda para incluir a los gobernadores de Morena, argumentando que deben dejar su cargo aquellos que tengan “vínculos con el crimen organizado”.

La Respuesta de Sheinbaum

Al ser cuestionada sobre los señalamientos, la presidenta Sheinbaum desestimó la idea de que la revocación ponga en desventaja a la oposición. Con un tono de incredulidad, preguntó por qué la oposición se sentiría en desventaja si, como afirman, la popularidad de su gobierno está decayendo.

Sheinbaum concluyó que la única razón para su alarma es que la oposición “en el fondo sabe que nuestro movimiento tiene mucho apoyo popular”.