CIUDAD DE MÉXICO.- Primero fue la Secretaría de la Función Pública (SFP) y ahora es la Auditoría Superior de la Federación (ASF) la que detectó irregularidades financieras y administrativas en la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade) por un probable daño o perjuicio a la Hacienda Pública Federal por un monto de 186 millones 706 mil 583 pesos con 16 centavos.
Tras la fiscalización al ejercicio 2019, en específico al programa E-017, denominado “Atención al Deporte” se detectaron diversas anomalías que van desde la adjudicación directa sin cumplir los procesos respectivos, contrataciones de servicios sin verificar la capacidad técnica y sanitaria de las empresas o proveedores y hasta el pago de sueldos a entrenadores cubanos de quienes ni siquiera se sabe si ingresaron al País, entre otras.
Entre el análisis de los recursos erogados por la dependencia para el pago de servicios, en este caso la mayoría de cómputo y sistemas, destaca el contrato con la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo por el que la ASF presume un probable daño o perjuicio, o ambos, por 103 millones 356 mil 996.78 pesos
Otro contrato en el que se detectaron muchas inconsistencias es con la empresa de alimentos CIMCSA por el que se presume un posible daño superior a los 14.8 millones de pesos.
En sus indagatorias, la ASF incluso entrevistó a uno de los socios de la empresa veracruzana en un Centro de Readaptación Social, donde se encuentra recluido. Esta persona y el representante legal de la compañía denunciaron primero ante autoridades locales y después ante la Fiscalía General de la República a la titular de la Conade, Ana Guevara y otros funcionarios, por extorsión para la adjudicación del contrato.
El organismo responsable del deporte tricolor habría lucrado incluso con el análisis de muestras de sangre y orina de seleccionados nacionales para detectar dopaje, las cuales fueron enviadas al laboratorio de La Habana mediante el Suplemento al Convenio de Colaboración y Programa de Actividades de Cooperación en materia de Deporte para 2019 con el Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación de la República de Cuba (INDER), suscrito por el hoy ex subdirector de Calidad para el Deporte, Israel Benítez, destituido el año pasado, por otros motivos.
En materia de seguridad para los deportistas, a la Conade también se le encontraron faltas graves pues firmó un contrato con una empresa que nunca garantizó la calidad de sus alimentos, en particular con los productos cárnicos, ya que no presentó la certificación TIF por lo que la carne que consumieron pudo haber estado contaminada con clembuterol u otras sustancias.
Agencia Reforma