Con el fin de monitorear e identificar a las personas que tiran basura en lugares clandestinos, la ciudad de McAllen instaló cámaras de seguridad.
Las autoridades advirtieron que no se tolerarán más los basureros clandestinos y quien sea sorprendido arrojando desechos como llantas, vidrio, ropa o plástico, enfrentaría una multa de 500 y hasta 2 mil dólares, en última instancia se aplicaría la cárcel.
McAllen colocó 12 cámaras en puntos estratégicos que les permitirán monitorear a las personas que tiren basura de manera clandestina en puntos ya conocidos.
“Las rotamos en lugares donde la gente nos dice que hay alguien tirando basura”, dijo César Rodríguez, asistente de códigos y salud ambiental en McAllen