Con las recientes lluvias derivadas de la tormenta tropical “Alberto”, la crisis hídrica en Tamaulipas quedó en cosa del pasado, sin embargo, ahora los habitantes sufren con el agua que reciben en sus casas ya que llega sucia y con mal olor.

Derivado de esto, se han disparado los casos de enfermedades gastrointestinales en las clínicas del Estado.

Las quejas se han registrado en los municipios de Tampico, Madero y Altamira, que dependen del sistema lagunario de Tampico y que da servicio a más de 800 mil usuarios.

Al respecto, la Diputada local por Morena, Nayeli Lara Monroy, dijo que existen quejas de la población por la situación del vital líquido y lo atribuyó a que el nivel de agua de la laguna llegó al tope.

“Por lo mismo de las lluvias y de que algunos animales han muerto ahí en la laguna, en los ríos, sí está llegando (el agua) un poquito sucia, entonces ahorita se están abocando más a poder limpiar el agua para que llegue a las casas un poco más limpia”, señaló.

Por su parte, la Jurisdicción Sanitaria local, así como el Alcalde de Altamira, Armando Martínez, rechazaron los señalamientos, pero admitieron que el agua sí está turbia y con mal olor.

Añadieron que el aumento de enfermedades en la zona conurbada no está asociado a la problemática con el líquido.

Carlos Arturo Juárez, titular de la Jurisdicción Sanitaria, dijo que si los problemas de salud tuvieran como fuente la mala calidad del agua, el repunte de enfermedades sería en miles de casos.

El funcionario indicó que se realizaron tomas de muestras en distintas regiones en Altamira, así como sus respectivos estudios bacteriológicos que fueron enviados al laboratorio estatal.

“Se tomaron 23 muestras humanas, y bueno, los resultados han sido prácticamente eubacterias la fuente causal.

“No hay un virus en el ambiente, no hay incremento de bacterias en el ambiente, pero si hay un despunte que estamos vigilando, lo estamos viendo ya con el Alcalde, nos ha pedido estar muy puntuales y muy presentes con este tema”, dijo.

Agencias.