Anderson Lee Aldrich, de 22 años, fue acusado de cinco cargos de asesinato y cinco de crímenes motivados por prejuicio causantes de daños físicos, así como herir a otros en un bar gay de Colorado Springs, según registros judiciales obtenidos.
Una fuente policial dijo que en el ataque del sábado, el sujeto usó un arma semiautomática tipo AR-15 pero que también en el lugar fue recuperada una pistola y municiones adicionales. La fuente pidió no ser identificada al no estar autorizada para hablar públicamente del tema.
De momento se desconoce si Aldrich tiene un abogado que pueda comentar sobre su situación judicial.
El sitio atacado, Club Q, colocó un mensaje en su página de Facebook agradeciendo “la rápida reacción de clientes heroicos que sometieron al atacante y pusieron fin a este ataque de odio”.
Han surgido interrogantes sobre por qué las autoridades no trataron de quitarle las armas a Aldrich en 2021, cuando fue arrestado luego que su madre reportó que él la había amenazado con una bomba casera y otras armas.
Si bien en ese entonces las autoridades no hallaron explosivo alguno, activistas a favor del control de armas ahora preguntan por qué la policía no aplicó la ley de Colorado según la cual se le podría haber despojado de las armas que, según su madre, tenía.