La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ha admitido a trámite un recurso de revisión de Grupo Elektra, propiedad de Ricardo Salinas Pliego, en un caso que involucra un adeudo de dos mil millones de pesos (mdp) al Servicio de Administración Tributaria (SAT) por concepto de Impuesto Sobre la Renta (ISR) del ejercicio fiscal de 2010. Esta admisión ocurre apenas catorce días después de que la Corte aceptara revisar otro amparo de la empresa relacionado con un crédito fiscal distinto.
Un Tribunal Colegiado de la Ciudad de México había previamente ordenado a Elektra pagar este crédito fiscal de $2,000 mdp, pero la empresa impugnó la decisión.
En junio de este año, el Segundo Tribunal Colegiado en Materia Administrativa no le otorgó el amparo a Grupo Elektra, lo que llevó a la compañía a recurrir a la última instancia, la SCJN.
La SCJN tiene un plazo máximo de seis meses para resolver este asunto, lo que significa que la decisión final deberá estar lista a más tardar el 9 de abril de 2026.
La revisión de la Corte se centrará en la constitucionalidad de ciertos artículos de la Ley del ISR, relacionados con temas como la enajenación de acciones, deducciones e impuestos diferidos. Sin embargo, si el caso no se considera relevante, la Corte podría desecharlo antes.
La Estrategia de Salinas Pliego y el Monto Total de la Deuda
Esta acción de recurrir hasta la última instancia es calificada en el texto como un “modus operandi” habitual de Salinas Pliego para retrasar al máximo el pago de sus obligaciones fiscales.
Según la Procuradora Fiscal de la Federación, la deuda total de Salinas Pliego con el SAT asciende a aproximadamente $74 mil millones de pesos (cerca de $4,031 millones de dólares).
Elektra y el empresario mantienen al menos cinco litigios activos ante la SCJN. En este año, el grupo ha presentado 38 medios de impugnación para obstaculizar el desarrollo de estos juicios.
Salinas Pliego, quien también es dueño de TV Azteca y Banco Azteca, niega los adeudos tanto con el SAT como con los tenedores de bonos y AT&T Inc., y ha insinuado su posible incursión en la política.
