Por: Enrique Chávez
H. MATAMOROS.- Mientras los menores se bañan sobre una cubeta en los campamentos de refugiados centroamericanos en Matamoros, la ayuda humanitaria sigue detenida y solamente la iglesia les lleva un platillo de alimentos a la semana.
Hondureños, guatemaltecos, salvadoreños y cubanos están en el campamento del Puente Viejo desde hace más de dos meses, aunque este jueves les dieron buenas noticias a los de Cuba; un total de 14 eran llamados para su primer entrevista con autoridades migratorias de Estados Unidos.
En el campamento seguían los de otras nacionalidades contando sus testimonios.
Una hondureña de nombre Karla López, que llegó a México con sus 5 hijos menores, luego del asesinato de su esposo en su país de origen, dijo preferir las condiciones infrahumanas en que se encuentra, en vez de morir en manos de criminales en su país.
Por su parte el cubano Ramón Alain Figueredo, habla sobre el acoso de las autoridades de su país a su esposa y familia por haber salido en busca de asilo.
Finalmente al mediodía del jueves, permitieron el acceso a Estados Unidos a un grupo de 14 cubanos que tenían más de 40 días en los campamentos del bordo, de quienes ya se estudian sus casos de asilo político.